Estamos preparando la fiesta para Norma; sorpresa, claro, como debe ser una fiesta cuando cumples treinta. También esperamos a que llegue Mat.
- & te sientas a escribir. Ay sí, como ya tengo laptop, jodida snob- dice Carlos.
- Infla tus globos tú solo, cabrón, yo cargo a Sabi- le digo.
- Ya pues, nomás te hago burla. Morra, tú cuántos años tienes?- ahora resulta que no sabe cuántos años tengo.
- Veintidós, Carlitos, veintidós- digo mientras me paseo con Sabina.
- Yo conocí a Norma a los veintidós... - & ahora nos concierne la plática de las edades, la añoranza de los veintidós & del cabello largo, de las noches interminables en que ellos, los de ahora treinta, se bebían los infinitos litros de cerveza & boleros & tangos.
Debo hacer caso, si no terminamos de inflar globos, barrer el local, preparar los bocadillos & acomodar las mesas, nos gana Norma. Probablemente Mat llegue tarde, ha estado sumido en una nube de autodiscriminación; se dice viejo e inútil, los años se cumplen muy dentro de su estómago, le hacen estar triste.
![]() |
| Norma & Carlos terminarán así, se supone. |
Yo, probablemente, moriré antes de verlos, de cáncer o una cosa parecida; lo predijo mi mano.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los gatos dicen